Y qué si no voy al colegio…

Bueno ¿Qué podemos hacer los padres para suplir la socialización de nuestros hijos, sí hemos optado por continuar la educación virtual o en casa?, esta será la pregunta que muchos padres se están haciendo, si ya tomaron esta decisión o si la van a tomar, estas son elecciones difíciles pero optativas en un punto de educación coyuntural y cambios mundiales.

Para algunos padres no será una difícil decisión pues simplemente la complementan con viajes, salidas y visitas a las que pueden acceder por su forma de trabajo o libertad financiera y mental; pero que hay de aquellos que por múltiples razones no tienen claro como poder suplir este déficit; muy sencillo, el primer paso es lanzarse y querer algo diferentes para nuestros chicos, a quienes actualmente la modernidad, no solo los alcanza sino que para ellos esta es como plastilina en sus manos moldeando su nueva realidad con astucia y lo mejor con gusto.

Nuestros chicos de hoy son nativos digitales, ven un mundo abierto en el sentido más universal que la vida les propone, hoy ya no podemos pensar en una educación encerrados en un colegio, muchos pensarán que optar por la educación digital es guardarnos en casa, pero por lo contrario es escudriñar el mundo y no aislarnos en el pequeño universo de las paredes de un establecimiento.

¿Cómo podemos suplir esa necesidad de contacto físico? Pues la socialización remota también existe, nuestros niños y adolescentes de hoy se hablan, pelean y sufren con sus compañeros a través de las pantallas se odian y aman igual, por ello el centro del asunto está en ¿Cómo se suple físicamente esa interacción?

Aquí expondré algunas de las maneras como lo podemos lograr, pues realmente somos nosotros los padres quienes podemos propiciar estos espacios:

- Prácticas deportivas, cualquiera de ellas puede proveer un ambiente sano, satisfactorio y de interacción con otros, trabajando en equipo.

la familia el motivo para socializar


- Prácticas artísticas, (pintura, música, danza, origami…) cualquiera de ellas puede ir creando un círculo de amigos que al inicio será de intercambio de ideas, pero finalmente les propiciará espacios de relación agradables.

- Salidas espontáneas al parque más cercano de casa o del conjunto residencial, en el cual muy seguramente irán interactuando con sus pares y estos vecinos podrán ser parte de su círculo social presencial.

- Visitas a familiares y amigos, el no olvidarse de este punto es vital, pues en el proceso de crecimiento de nuestros hijos muchos amigos y familiares han de pasar por ellos y de nosotros sus padres depende fomentar estas amistades y propiciar encuentros de calidad entre ellos.

- Viajes y paseos, aprovechando este tipo de educación se pueden realizar salidas las cuales no tienen que ser costosas, pero si provechosas para interactuar con la naturaleza y generar diferentes ambientes de relación con otros, esta modalidad nos da la posibilidad de no estar atados a un solo sitio para recibir nuestras clases y poder recorrer el mundo si quisiéramos aprendiendo del mismo y su multiculturalidad. 

Esta manera de educación no solo tiene sus bondades para los chicos y chicas sino también para las familias que desean un cambio en sus rutinas y diario vivir, el poder frecuentar una finca en la tranquilidad del paisaje, el establecerse en una isla como talvez siempre lo han soñado sin preocuparse ya por estar cerca o lejos del lugar que sus hijos estudian, así mismo los padres de hoy han intercambiado sus prioridades la mayoría de ellos buscando empleos o desarrollan negocios que les permitan mayor libertad en su movilización siendo cada vez más normal el trabajo remoto.

La educación remota también genera maravillosas conexiones a tiempo real con diferentes lugares del mundo si así lo queremos, por ejemplo podemos aprender francés con nuestro amigo que vive en Francia nosotros estando en Colombia y a futuro muy seguramente después de varias sesiones, la puerta estará abierta para que tanto uno como el otro puedan visitarse y continuar con ese maravilloso aprendizaje; no solo de un idioma sino de una cultura y una amistad, así mismo con nuestros hijos y alumnos que toman clases desde diferentes lugares, llegará el momento donde podamos generar intercambios entre ellos y validar aún más nuestras prácticas educativas, dándole por fin a la educación su valor multicultural que el mundo nos ofrece.

https://www.safecreative.org/work/2103027066955-y-que-si-no-voy-al-colegio

 

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